lunes, 14 de julio de 2014

Problemas sin identificar

Muchas veces nos pasa que tenemos un problema pero no lo identificamos y no lo planteamos bien y, como consecuencia, respondemos a él de modo reactivo sin pararnos a pensar, o pensando muy mal, en cómo habría que resolverlo.
Supongo que volveré a la cuestión pero, de momento, he aquí varios ejemplos relacionados entre sí:
el problema de legislar a la carta;
el problema del gobierno francés con amazon (ya citado en el post anterior);
el problema del sector editorial español; y, en este caso, es el lector el que no ha de mezclar distintos problemas: el problema de la lectura, el problema de los lectores, el problema de la difusión de los libros de verdadera calidad, el problema de las editoriales españolas (pero no de todas, pues algunas se bandean más que bien, o eso parece).